En la Costa Caribe de Nicaragua, el nivel de pobreza supera el 80% registrado en todo el país (45%). Esta situación ha venido repercutiendo de manera negativa en la familia costeña, afectando de manera directa, a los adolescentes y jóvenes principalmente indígenas y afrodescendientes de ambas Regiones Autónomas, señala un diagnóstico realizado por el centro de derechos humanos ciudadanos y autonómicos.
“Yo dejé de estudiar porque salí embarazada cuando estaba en cuarto año, ahora me dedico a cuidar a los dos hijos que tengo y se me hace imposible seguir con mis clases”, dice la joven Yajaira Martínez, del barrio Pancasán, de Bluefields.
La falta de empleo en las Regiones Autónomas ha provocado la desintegración familiar, la mayoría de los padres han abandonado a sus familias en busca de mejores condiciones de vida, situación que ha venido repercutiendo de manera negativa en las relaciones entre padres e hijos.